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El secuestro de Mary cap 4

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Capítulo 4

Nuevas pistas conducen a nuevos problemas.

Watson y Holmes observaban las calles, mientras iban en carro. El silencio reinaba entre los dos, un silencio inquietante. Watson miro hacia fuera, llovía como siempre, aunque había mucha gente. Volvió a observar a Holmes, el hombre tenía unas ojeras considerables, el cabello desaliñado, su vestimenta era sucia, su nariz congestionada y ojos caídos. Suspiro, sabía que él había provocado todo aquello. Entonces se fijo en algo primordial, aquel abrigo, era suyo. Lo dejo a propósito, por que él sabía que Holmes no era de las personas que compraba ropa. Recordaba que ese abrigo era muy calido, era de un color marrón, de piel y eso proporcionaba un gran calor. Pero lo que sabía que Holmes no se dio cuenta, fue que en un bolsillo interior del abrigo se encontraba una pequeña foto. Era una foto de ellos dos, en el que se abrazaban, la foto era de su primer caso, fue la primera vez que se dio cuenta de que Holmes era la persona mas especial que conocería.

Nunca lo olvidaría.

Vio como Holmes cayó en los brazos de Morfeo, apoyando la cabeza en el hombro izquierdo. Una de sus aficiones favoritas, era ver el detective dormir.

Cuando dormía mostraba su inocencia. No le importaba nada, nada le preocupaba. Estaba en el mundo de los sueños.

Holmes respiraba lentamente y su boca estaba un poco abierta, estaba realmente descansando, como si hace mucho tiempo que no descansaba tan bien.

Y el momento mas dulce del sueño llegaba, en el momento en el que el corazón de Watson se deshacía.

Holmes lamía su pulgar, tranquilamente.

Si alguien lo viera así, le sería indiferente. El loco detective, pero a la vez inteligente, Sherlock Holmes, chupándose el pulgar, sería obvio.

Pero en la manera que lo hacía, no era obvio para nadie.

Solamente para Watson.

Conocía muy bien la dulzura que Holmes desprendía y la gran timidez hacía los momentos intimos. Al detective se le hacía muy difícil hablar sobre sus propios sentimientos, podía sacar a una persona, con sus preguntas hasta aquella vez que se sintió deprimido por pisar una hormiga. Pero cuando era sobre él, solo podía tartamudear.

"Watson.." Dijo Holmes mientras dormía.

John sonrió de nuevo, acarició lentamente el pelo del detective y depositó un beso en su frente. En aquellos instantes el doctor se le olvidaba del exterior, la moral, la religión, su esposa..solamente estaban el detective y él, en ese momento y nada mas.

-"Ya hemos llegado, señores" Dijo el conductor.

-"¿Eh?..Digo muchas gracias caballero, vamos Holmes despierta." Dijo Watson zarandeando a Holmes.

-"Em..es..que..eh..Watson..¿hemos llegado?". Dijo un dormido Holmes.

-"Si, hemos llegado, vamos." Dijo Watson.

Los dos se levantaron de sus asientos, salieron del carro y pagaron al joven conductor. Dejó de llover así que guardaron el paraguas y siguieron caminando.

Donde vivía Watson era muy parecido a Baker Street, misma calle, mismas casas..La unica diferencia era la gente. La gente que vivía en ese barrio, era el comportamiento ideal de un aristócrata. Eran personas adineradas, amaban la tranquilidad ante todo y algunas veces iban con demás nobles a enseñarse sus casas o dar fiestas tranquilas donde bebían te.

En Baker Street triunfaba la fiesta popular, los bailes, la música..Todo eso era habitual en esa calle, pero si se pusiera aquí, seguramente todos los músicos y artistas acabarían humillados y muertos, por simplemente irrumpir la tranquilidad.

¿Cómo podía John vivir aquí? ¿Tan poco le gustaba su vida anterior como para vivir en aquel sitio? Ni la lógica de Holmes podía llegar a ese punto.

Watson odiaba vivir aquí, odiaba a los aristócratas, simplemente su risa ya le daba escalofríos. Mary quería vivir cerca de la casa de sus padres, pero lo único que encontraron suficiente cerca fue una casa ha dos manzanas de la casa de los padres.

Llegaron a su destino. La casa del doctor en el exterior era blanca, con varias ventanas en vista de la calle y mas ventanas en vista de otra calle al lado.

Tenía un gran jardín con una mesa blanca, en donde tomaban el te, estaban colocadas dos pequeñas sillas. Había multitud de flores por los alrededores y las mas destacadas eran las rosas rojas, las preferidas de Mary y azules las preferidas del doctor.

Había un grande balancín blanco, en donde el doctor y Mary pasaban la tarde.

Entraron a la casa, todo estaba ordenado. La casa era en verdad bastante simple.

Al principio la entrada tenía un armario para colocar los zapatos, sombreros y abrigos de forma ordenada. Al abrir una puerta se encontraban con un gran comedor, había una mesa de cristal con multitud de sillas alrededor en una esquina había una gran chimenea, donde había dos sillones, estaba decorada con varias figuritas de porcelana y la mesa con un gran mantel estampado, también había una gran ventana donde se podía ver el jardín de otra casa, después al cruzar la puerta de la izquierda se podía encontrar la cocina. Estaba ordenada, con cantidad de cacerolas, ollas..etc. También había comida en una cesta y en britanas colgadas en la pared había varios productos como hierbas y demás sustancias para cocinar.

Volviendo a la entrada subiendo unas escaleras estaban la habitación de matrimonio y el lavabo.

El lavabo no tenía nada en particular. Había una ventana pequeña para que el aire entrara, un pequeño inodoro y una bañera espaciosa de color blanco.

La ultima habitación era la del matrimonio. La cama era grande y espaciosa, había multitud de armarios y estanterías. Con multitud de libros y objetos.

En una parte estaban los libros de Mary, había gran cantidad por lo que se veía que le apasionaba leer, aunque mas cantidad había en la de Watson. Multitud de libros de medicina y pequeños cuadernos donde había apuntado todas las aventuras con Holmes.

-"Una casa muy bonita, Watson". Dijo Holmes observando todas las pequeñas cosas de la casa."

-"También seria bonita la suya Holmes, si la ordenara de vez en cuando." Dijo Watson.

-"La nuestra Watson." Dijo sonriendo tristemente Holmes.

Holmes observo la casa, había innumerables fotos de Watson, Mary y familiares de Mary. Había una que otra foto antigua del hermano fallecido de Watson y del padre de este. En una de esas fotos, salía Mary junto a Watson en un gran prado. Aunque Mary se le veía bastante triste.

-"¿Qué le ocurría a Mary en esta foto Watson"? Dijo Holmes intrigado.

-"Fue nuestra primera cita, la verdad es que no se muy bien que le ocurría, se lo pregunte varias veces pero nunca me dijo nada." Dijo Watson pensativo.

-"Interesante, supongo que fue cuando usted me dijo que salía a comprar el pan". Dijo el detective enfadado.

"Sabía que aun estabas enfadado, porque te mintiera, pero usted no es el que siempre dice la verdad, Holmes." Dijo el medico, suspirando.

Holmes se quedo en silencio buscando alguna pista en el interior de la casa. Miro primero en el comedor, en la cocina, lavabo y la habitación. Pero ningún indicio de nada, ningún camino.

Se dirigieron al jardín. Holmes miro hacia los rosales azules, encontró un libro tirado en el suelo. Era un diario.

-"Vaya, mire Watson, el diario de Mary. Dijo Holmes intrigado.

-"No lo lea Holmes, es propiedad privada.·. Dijo el doctor desafiante.

-"Si no, no sabremos..um?" Dijo Holmes, antes de darse cuenta de que un papel cayera en el suelo.

Era una carta, decía así..

Querida Mary.

Hace tiempo que no te escribo, he odio que te casaste con un hombre honrado. Aun tengo las rosas que me regalaste, las colocó al lado mío, en un jarrón de porcelana, pensando en ti. Mary debo verte. Se que tu no quieres pero he de verte. Te espero en el restaurante Royal a las ocho de la noche.

Con amor, Tom.

Al acabar de leer la carta se quedaron boquiabiertos.

-"Vaya Watson, me parece que Mary le ha estado engañando, el papel no parece que sea muy antiguo, puede ser que estén ahora mismo cenando, o que hayan cenado. A lo mejor si vamos al Royal encontraremos alguna que otra pista."

Dijo Holmes mirando la cara de Watson.

John se quedó de piedra. Era imposible que Mary la engañara con nadie..¿Verdad?

Debía aclarase esto y rápidamente pidieron otro carro para ir hacía el Royal.

En la habitación de matrimonio en donde Mary guardaba sus libros, se podía ver una Mary un poco más joven junto a dos hombres sonriendo felizmente.

Fin

Nota: Espero que os haya gustado, comenten por favor. Para seguir avanzando y evolucionando. Espero que no les haya dejado con un dolor de cabeza. XD.

Voy ha hacer el pasado de Mary algo oscuro, espero no defraudar.

Próximo Capítulo Una misteriosa sombra.
Nuevo capítulo hasta ahora. Antes publicado en fanfiction.net. Espero que os guste ^^
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